Deliciosa Tarta de Queso sin Horno: Fácil, Cremosa y sin Huevos
Preparación de la baseMirad qué taza, posiblemente mi tarta de queso preferida, no te la puedes perder. Hola bolsones, comenzamos con esta tarta. Aquí tengo gelatina neutra, concretamente una cucharada o unos 15 gramos siempre de gelatina en polvo. Si quieres utilizar láminas, necesitarías unas 9 más o menos. Añado media tacita de agua, que está fría, y remuevo hasta que se disuelva totalmente.
Perfecto, ahora vamos a triturar las galletas. Utilizo 25 unidades de galletas tipo maría y las parto en trozos antes de colocarlas en el procesador de alimentos. En un minuto se convierten en auténtico polvo de galleta. También añado una cucharada de leche y un tercio de taza o 60 gramos de mantequilla. Enciendo la máquina de nuevo y mezclo bien todos los ingredientes. Si no tienes un procesador de alimentos, puedes meter las galletas en una bolsa y machacarlas hasta obtener el polvo de galleta.
Una vez que tenemos la mezcla de galleta lista, cogemos un molde de 20 centímetros de diámetro y colocamos dentro la mezcla. La apretamos muy bien para que quede prensada y firme. Es importante apretar también los bordes para obtener una superficie perfecta. Reservamos el molde en la nevera o refrigerador para que se endurezca un poco mientras preparamos el resto de la receta.
Preparación de la crema de queso
La crema de queso es muy sencilla de hacer. Mezclamos en un recipiente tres tazas o 600 gramos de queso de untar (queso crema o queso Philadelphia), 400 mililitros o 2 tazas de nata para montar, tres cuartos de taza o 150 ml de leche condensada y un buen chorro de esencia, extracto o aroma de vainilla (opcional). Mezclamos bien todos los ingredientes.
Es recomendable calentar la mezcla para que los ingredientes se disuelvan más fácilmente.
En este blog encontrarás consejos y trucos para crear postres deliciosos en la comodidad de tu hogar. Hoy te traemos una receta especial: una tarta de queso con mermelada de arándanos que te hará agua la boca.
Preparación de la crema
Para comenzar, vamos a preparar la crema de queso. En una cacerola, calentaremos la crema a fuego medio hasta que se licúe por completo sin llegar a hervir. A continuación, agregaremos la gelatina, previamente hidratada, y la disolveremos por completo. Luego, retiraremos la crema del fuego y la dejaremos enfriar.
Preparación de la base
Mientras la crema se enfría, vamos a preparar la base para nuestra tarta. Colocaremos la base en el molde y verteremos la crema sobre ella, asegurándonos de cubrir toda la superficie de manera uniforme. Luego, llevaremos la tarta a la nevera y la dejaremos reposar durante al menos cuatro horas.
Añadiendo la mermelada de arándanos
Una vez que la tarta ha reposado lo suficiente, desmoldaremos y removeremos los papelitos de los laterales. A continuación, añadiremos una fina capa de mermelada de arándanos por encima de la tarta, asegurándonos de distribuirla de manera uniforme. Esto le dará a la tarta un toque de color y un sabor delicioso.
¡Disfruta de tu creación!
Ahora viene la mejor parte: ¡probar la tarta de queso con mermelada de arándanos! Puedes cortar una porción y disfrutarla en cualquier momento del día. El interior de esta tarta es simplemente espectacular, ¡te aseguro que quedarás encantado(a)!
Tarta de piña sin horno: un postre fácil y delicioso
Hoy te traigo una receta de postre muy fácil que no necesita horno y que te recomiendo a todo el mundo. Se trata de una deliciosa tarta de piña que no solo tiene una pinta y textura cremosa, sino que también es muy sencilla de hacer. Así que, ¡espérala un poquito más de cerca!
Ingredientes para la tarta de piña sin horno
- Base de galletas: 200 gramos
- Mantequilla sin sal: 100 gramos
- Leche condensada: 500 gramos
- Jugo de piña en lata: 200 ml
- Gelatina sin sabor: 15 gramos
- Crema de leche: 200 ml
Preparación de la tarta de piña sin horno
- Tritura las galletas en un procesador de alimentos.
- Derrite la mantequilla y mézclala con las galletas trituradas para formar la base de la tarta.
- Presiona la base de galletas en el fondo de un molde desmontable y colócala en la nevera para que se endurezca.
- En un recipiente aparte, mezcla la leche condensada y el jugo de piña.
- En otro recipiente, disuelve la gelatina sin sabor en agua caliente y añádela a la mezcla anterior.
- Por último, incorpora la crema de leche y mezcla todo hasta obtener una textura homogénea.
- Vierte la mezcla sobre la base de galletas y refrigera durante al menos 4 horas, o hasta que esté firme.
Variantes y sugerencias
Una variante de esta tarta podría ser sustituir la mermelada de arándanos por otro tipo de cobertura o incluso decorarla con frutas frescas, como fresas o kiwis. Esto le dará un toque fresco y elegante a la tarta. ¡Déjame tus ideas en los comentarios!
Conclusión
Esta tarta de piña sin horno es una auténtica delicia que sorprenderá a tus invitados. Su textura cremosa y su sabor refrescante la convierten en el postre perfecto para cualquier ocasión. ¡No dudes en probarla y compartir tus resultados!